La consola Vectrex fue creada en 1982 por la compañía americana GCE, y distribuida en Europa por MB Electronics a partir de 1983. Su principal peculiaridad, además de incluir el monitor, es que utiliza gráficos vectoriales.
La Vectrex "a pelo" sin overlay (la lámina de plástico transparente que da color a los juegos)
Los puristas de la Vectrex no suelen usar overlay cuando juegan
Ficha técnica
CPU: Motorola 68A09 a 1.5 Mhz
ROM: 8K
RAM: 1K
Sonido: AY-3-8912, 3 voces
Con el overlay del Mine Storm, que es el juego que viene en memoria al encender la máquina
El mando de control es de una suavidad y precisión increíbles
El hueco dejado al extraer el mando de control deja al descubierto los controles
de encendido/volumen, reset y la toma para un segundo mando
Logotipo frontal
El slot para los cartuchos se encuentra en el lateral izquierdo de la máquina
Atención, aleje esta maravilla de las manos de los niños...
By Milton Bradley, es decir de MB
Control de brillo
Evitar ponerlo al máximo por el bien del fósforo del tubo de 9 pulgadas
Voy a aprovechar para recuperar también ciertas publicaciones que hicimos en el blog de GAME, que casualmente también ha desparecido recientemente :_(
Este es el artículo que escribí allí, referido a la Vectrex, y con carácter introductorio para las generaciones que no conocen en absoluto el aparato.
GCE/MB/Bandai Vectrex
Vectrex es una consola curiosa por varios motivos: sus diseñadores no llegaron a comercializarla ellos mismos (cedieron su explotación primero a GCE, luego a MB); fue la primera consola en disponer de gafas 3D; y ha sido la única consola en mostrar una imagen vectorial, no basada en el retrazo del monitor.
En un monitor de tubo corriente, la imagen comienza a generarse en la esquina superior izquierda; el puntero que “dibuja” cada uno de los puntos que forma la imagen recorre la superficie de la pantalla de izquierda a derecha y de arriba abajo a una velocidad tan rápida que no es perceptible por el ojo.
En un monitor vectorial se dibujan dos puntos unidos por una línea (es decir, un vector). El haz de electrones que proyecta esos puntos no tiene que recorrer toda la superficie de la pantalla para poder dibujarlos, sino que dibuja el vector directamente sobre el lugar elegido por el programa (juego) que lo controla. Los monitores vectoriales son los típicos que encontramos en los osciloscopios antiguos, analógicos.
MONITOR VECTORIAL
MONITOR CON RETRAZO (RASTER)
OSCILOSCOPIO ANALÓGICO
Vectrex se presentó en el CES de verano (el de Chicago) de 1982, y se empezó a vender a finales de ese año; llegó a distribuirse no solo en Estados Unidos, sino también en Europa, e incluso en Japón a través de Bandai. Sin embargo, el crash que experimentó el mercado de videojuegos de consolas en Estados Unidos a partir de 1983 supuso la retirada de MB de la industria del hardware y el fin de la consola, que cesó su comercialización en 1984. Aquí llegó a liquidarse en las tiendas de Galerías Preciados.
Algunos de los primeros juegos de máquina recreativa también utilizaban monitores vectoriales, y GCE/MB consiguió los derechos para convertirlos a Vectrex; es el caso de títulos como Asteroids, Space Wars o Armor Attack. Aunque la imagen que produce la consola es en blanco y negro (es decir, dibuja los vectores solo en blanco, sobre un fondo negro), los diseñadores inventaron un sistema de overlays para dar una sensación de color. Un overlay es un acetato, una lámina de plástico coloreada de acuerdo con la acción de cada título: por ejemplo, el overlay del juego de fútbol americano (llamado Blitz!) es de color verde para representar el césped del campo.
MUEBLE ORIGINAL DE ASTEROIDS
Los juegos de distribuyeron en formato cartucho, junto con su overlay respectivo, en unas cajas grises de cartón muy reconocibles y coleccionables. Con la consola se incluía un juego en la ROM interna del aparato, el Mine Storm, clon del mítico Asteroids. Otros títulos reseñables, amén de los ya citados, son la adaptación de Berzerk, Spike (que imita la mecánica de la primera pantalla de Donkey Kong), Fortress of Narzod o Clean Sweep, un clon de Pacman que incorpora una variante curiosa sobre la mecánica original: el sprite protagonista engorda según va tragando cocos hasta que no puede ni comer ni aumentar más de tamaño; en ese momento debe entrar en un refugio en el centro de la pantalla para “evacuar” el exceso de comida, recuperar el tamaño original y retomar la tarea de limpiar la pantalla.
La comunidad de aficionados a la consola sigue produciendo juegos para ella en la actualidad, y además se han podido recuperar títulos que no se llegaron a comercializar a causa de su abrupta retirada del mercado. Todos ellos se pueden jugar en el hardware original gracias a cartuchos flash específicos para Vectrex desde los que se pueden cargar las ROMs de los juegos clásicos, de los que se han recuperado y el homebrew más actual.
En el servicio técnico de GAME hemos reparado ya dos Vectrex, una MB europea y una GCE americana. Esta última llegó en un estado auténticamente deplorable: había sido abandonada en un campo de siembra, lo que la había dejado completamente cubierta de barro y la había convertido en un atractivo edificio de apartamentos para una familia de caracoles.
El interior de la consola estaba cubierto de tierra:
Antes de comprobar si el aparato funcionaba tuvimos que retirar todos los residuos y limpiar la placa de la consola en una cubeta de ultrasonidos. Después de eliminar todos los objetos extraños que encontramos y los cortocircuitos potenciales, encendimos la Vectrex… para comprobar que no funcionaba.
Os ahorraremos los detalles técnicos, pero fue necesario sustituir varios componentes (varios diodos y un regulador de voltaje) antes de obtener los voltajes correctos en las placas lógica y de vídeo; cuando los restablecimos, ya teníamos imagen en pantalla, aunque no se distinguía ninguna forma. Para poder encontrar la segunda avería tuvimos que comparar señales con las de una Vectrex que funcionaba, que teníamos abierta al lado. Así descubrimos que el zócalo de uno de los circuitos integrados no daba continuidad cuando insertábamos el circuito: tenía varias patillas deshechas a causa de la corrosión. Al sustituirlo recuperamos la plena funcionalidad del aparato.
Pusimos especial empeño en esta reparación: no todos los días tenemos la oportunidad de recuperar un aparato que forma parte, por derecho propio, de la historia de los videojuegos. Ah, y ningún caracol resultó dañado como consecuencia de esta reparación, porque todos fueron realojados en un descampado cercano.