robcfg escribió:En MacOS pulsando Shift+Command+3 sacas una captura de todas las pantallas.
Sí, incluyendo todos los artificios gráficos que se estén implementando en lo que se captura y en ella en sí misma, por lo que si lo que se pretende es obtener una captura de algo que se esté emulando con fidelidad 1:1 sólo queda abogar a la capacidad visual de quien la va a usar y su nivel de pijotismo.
Mejor me explico y me pongo como ejemplo porque es evidente que es lo que mejor conozco:
Todos estos comentarios vienen de mi petición -por cierto, en
https://zonadepruebas.com/viewtopic.php?f=13&t=9127 tengo otra con más jugo- de disponer de un emulador de Spectrum por y para extraer capturas de pantalla porque lo que hacía cuando publicaba juegos era utilizar snapshots del juego en cuestión. Como eran diseños
a la ERBE el snapshot iba en la pestaña de la parte trasera del inlay, del tamaño de un sello de Correos. Al ser tan menudo mi exigencias siempre ha sido la de tener un snapshot prístino, prácticamente que se pudieran contar los pixels impresos con un cuentahilos de impresor.
¿Cómo extraía yo los snapshots? Con una captura de lo que en ese momento había digamos en la VRAM del emulador, obteniendo un SCR o PNG de 288x224 pixels, una pantalla de Spectrum contando los bordes. Había emuladores que la sacaban de 256x192 directamente, otros de 272x208, siempre 256x192 más 8, 16, 32 o en ocasiones 24 pixels de más por cada costado. Sabiendo que lo original era 256x192 sólo tenía que restar medidas hasta obtener lo deseado.
¿Qué pasa con capturas de escritorio o capturas de emuladores más modernos? Que capturan lo que hay en pantalla, la VRAM reflejada y al tamaño y densidad que el usuario tiene definido su entorno. Hay emuladores que permiten redimensionar la pantalla del emulador a mano, con el puntero en la esquina inferior derecha y arrastrar y eso hacía que muchas capturas que me hacían llegar dieran proporciones impares que cuando ampliaba la imagen los pixels estaban deformados. En proporción al pantallaco que uno tiene delante y moviéndose bichitos en pantalla pues pueden pasar desapercibidos, sólo que al capturarlo, reducir el tamaño a un sello de Correos y, atención,
imprimirse el resultado es deficiente, inadecuado e intolerable. Guardemos en la memoria el detalle
imprimirse, por favor.
Si en la emulación, intencionado o involuntariamente, se añaden artificios como rasters, dithering, efectos de CRT o filtros varios, la captura que se consigue es una imagen que, de nuevo, cuando la vamos a imprimir nos encontramos con la de que Dios es Cristo. Y eso es lo que hace una captura directamente del escritorio, una instantánea de nuestra resolución, nuestro entorno adaptado, nuestra emulación recreada a nuestra conveniencia pero que no es lo que de verdad está sucediendo dentro de lo emulado y eso es lo que queremos enseñar en el inlay o en el manual del juego, lo que debemos conseguir es la imagen más fidedigna posible. No es necesario si uno desconoce cómo hacer bien las cosas y si su nivel de conformismo no es de endiablado sibarita, que yo no me encontraría en esa categoría y porque, ahora sí, está lo de
imprimirse.
Simplificándolo muy mucho, podríamos decir que cada microgota que imprime una impresora equivale a un pixel. En realidad no es así porque lo de ahora son microgotas microscópicas, la tecnología ha avanzado una barbaridad pero lo simplifico hasta lo absurdo para que explicarme mejor.
Si tenemos una imagen del tamaño de un sello de Correos que nativamente es de 256x192 pixels y 16 colores la impresora soltaría 256 gotitas en horizontal y 192 gotitas en vertical. Pensad que si tenéis un JPG con pixels deformados, rasters superpuestos y dithering aplicado para que vuestros ojos no lo pasen tan mal a la hora de jugar, la impresora seguirá soltando 256 gotitas en horizontal y 192 en vertical pero a millones de colores, gotitas en miriadas de tonos y matices de colores, gotitas de TINTA, colores que se forman con la mezcla de esa tinta. Al final, ni de cerca ni de lejos se distinga nada bien el snapshot que pretendíamos colocar a modo de muestra y exposición de lo que es el juego, se acaba emborronando todo, como si os ponéis vuestro emulador favorito de Spectrum, os alejáis un par de metros de la pantalla y le sacáis una foto. ¿Esa foto es la que querríais enseñar a cualquiera par dar a conocer vuestro juego? Pues eso es lo que se ha de evitar que salga impreso en un inlay.
Por eso, amigos míos, mi cabezonería en buscar la excelencia, en ofrecer lo mejor que se pueda y lo que el dinero permite.
Hasta aquí mi tostón cortarrollos periódico. Que Dios salve a ustedes y los suyos por muchos años, con buena salud, éxito y felicidad.